Benjamín Daniel Norton, fanático de la dictadura sandinista y periodista estadounidense, fue nacionalizado, según envidencia una certificación del Ministerio de Gobernación publicada este lunes 14 de agosto en el diario oficial La Gaceta.
EL documento alega que Norton ha cumplido los requisitos y formalidades establecidas en la Constitución Política, para adquirir la nacionalidad nicaragüense.
“Tiene residencia permanente en Nicaragua desde el 16 de abril de 2021, de forma continua e ininterrumpida, y tiene vínculos con nicaragüenses”, se lee.
Escucha”Régimen arrecia ataques contra la UCA: Ordena congelar sus cuentas bancarias” en Spreaker.La resolución fue firmada el pasado 10 de agosto por el comandante de brigada Juan Emilio Rivas Benites, titular de la dirección General de Migración y Extranjería del Migob (DGME).
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Norton al ser afín a la dictadura de Ortega ha “ganado” nacionalidad contraste a la situación de los presos políticos a quienes desterró de Nicaragua el pasado 9 de febrero de este año.
Norton, servil de la dictadura desde 2018
El periodista estadounidense apareció por primera vez en las pantallas del país en el año 2019, cuando le realizaba una entrevista al dictador de Daniel Ortega, donde abordaba sobre el “intento de golpe de estado” del 2018.
Desde entonces Norton dejo entrever la admiración y respeto a Ortega. Otro episodio fue donde apareció bailando la cumbia “el comandante se queda”, con la que los simpatizantes de Ortega celebran la represión armada contra las manifestaciones.
Benjamín Norton también participó como acompañante electoral en las cuestionadas y no aceptadas votaciones presidenciales del 2021, en las que Ortega garantizó su tercera reelección consecutiva.
Benjamín Norton recibe de Ramona Rodríguez Pérez, rectora de la UNAN-Managua, un “título honorífico de visitante distinguido”, en junio de 2021. Foto: Tomada de la UNAN-Managua
Norton se presenta como investigador y periodista de investigación, pero su principal trabajo ha sido el de brindar propaganda a regímenes como el de Nicaragua y Venezuela y actualmente mantiene lazos con medios prorrusos.
El régimen de Daniel Ortega ha sido generoso con ciertos perfiles migratorios, como prófugos de la justicia, científicos rusos o diplomáticos afines como es el caso de Mauricio Funes, expresidente de El Salvador quien vive en Nicaragua desde septiembre de 2016, cuando Ortega le otorgó asilo político y desde julio de 2019 es ciudadano nicaragüense.
