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Campesinos de Madriz alistan sus tierras para siembra de primera

Unas 16 mil familias del campo, ya alistan sus parcelas de entre cuatro y doce manzanas promedio cada una, para la siembra de primera que se avecina a partir del 18 de mayo, cuando se prevé, inicia la actividad agrícola posterior a algunas lluvias. Los granos a sembrar son: maíz y frijol en algunas zonas de los nueve municipios del departamento de Madriz.

Según registros anteriores del Ministerio Agropecuario y Ganadería (MAG), en Madriz, cada año más de 16 mil pequeños y medianos productores agrícolas en ocho de los nueve municipios que conforman este departamento, alistan sus tierras desde mediados de abril para la siembra de primera de maíz y frijol.

Esa misma institución destacó recientemente que la producción nacional de maíz, en el ciclo agrícola 2022-2023, alcanzó los 8.4 millones de quintales cultivados por unos 180 mil productores agrícolas, mientras que en el área de la siembra de frijol rojo, se produjeron unos 4.8 millones de quintales cultivados por unos 140 mil agricultores en todo el país. En total, según esos mismos registros, en el ciclo productivo 2022-2023 se cultivaron más de 35 mil 253 manzanas de tierras en todo el territorio nacional.  

La cosecha de la siembra de primera del año pasado, fue muy buena por un invierno regular que les permitió a las familias campesinas obtener buenos resultados.

En el caso del departamento de Madriz, los municipios que más producción de maíz y frijol generan en las siembras de primera, postrera y apante son Somoto, Totogalpa, Telpaneca y San José de Cusmapa. El periodo de Apante es un periodo especial de cultivo que se realiza tentativamente entre el 15 de noviembre y el 15 de diciembre, fecha también en que algunos aprovechan para sembrar millón y maicillo.

Esperan buen invierno

Lo que estamos haciendo y hacemos siempre, es alistar las tierras;  limpieza de maleza, quema de rastrojo y arado de surcos con bueyes,  para esperar que en los primeros días de mayo caiga algún aguacero (lluvia fuerte) para tirar después las semillas de maíz y posteriormente de frijol, explicó don José Estanislao Martínez Reyes, de 70 años, habitante de la comunidad de Malpaso del municipio indígena de San Lucas, Madriz.

Don José Estanislao señaló que en la sacada de la cosecha de primera del año pasado, produjo más de 26 quintales de maíz y unos 18 quintales de frijoles.  Tuvimos la suerte que el precio del saco (cien libras) de maíz nos lo vinieron a comprar a 900 córdobas, creo que ahorita anda por los mil córdobas, y el frijol rojo, el quintal estaba a 3,500 córdobas. Ya ahorita anda por los 3 mil 600. Esperamos que no bajen de precio porque el costo de los insumos para la siembra están por las nubes, señaló Martínez Reyes. 

Por su lado, don Luis Felipe Pérez López, de 56 años, productor de la comunidad La Calera del municipio de Palacagüina, en Madriz, dijo que en su localidad, ya casi todos los productores campesinos alistan sus tierras a la espera de las primeras lluvias a mediados de mayo. Siempre llueve en estos días, pero lo bueno es esperar que caigan unos cuantos aguaceros más para tirar ya las semillas y comenzar a cultivar antes del 18 de mayo, cuando ya caen las lluvias del invierno, terminó diciendo.

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Buenos resultados el año pasado

En tanto, Ernesto José Altamirano Silva, de 62 años, productor de la comunidad de Santo Domingo del municipio indígena de Totogalpa, zona también del departamento de Madriz, manifestó que ya están alistando las tierras para la próxima siembra de maíz y frijol.  

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Aquí ya estamos trabajando antes que caigan los primeros jocoteros (lluvias), ya que solo faltan unas tres semanas para que entremos al periodo lluvioso, expuso entusiasmado. 

Dijo que el año pasado, no les fue mal con las siembras de primera y postrera.  “Es que logramos sacar algo de la siembra de maíz y frijol y logramos también vender a buen precio el producto. Aquí vinieron unos señores salvadoreños que pagaron bien el quintal de maíz y frijol”, dijo.

“Este año esperamos que también nos vaya bien, aunque todo está caro; el quintal de urea, abono, los pesticidas, insecticidas, las herramientas y hasta las semillas”, se quejó.

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