En circunstancias que autoridades locales todavía no explican públicamente, parte de la propiedad de la estación de Policía de Masaya le fue cedida a inversionistas privados de capital chino para establecer una tienda, la que funciona ahí desde el año pasado.
Los habitantes de esta ciudad han expresado su inconformidad, porque creen que son bienes del Estado cedidos “a extranjeros” que instalaron sus negocios con ventajas que un comerciante local no ha tenido, pero además, esas ventajas se traduce en ventas de productos de bajo precio que les genera competencia desleal.
Muchos negocios que llevaban 10, y hasta 15 años se ven amenazados, incluso ya hay quienes piensan en cierres porque sus ventas, se han desplomado incluso desde antes de las ofertas de las tiendas de origen chino. “Aquí los impuestos no se han dejado de cobrar, no ha importado pandemia, crisis política lo que sea, pero ellas (las tiendas chinas) ahora se instalan con ventajas”, se quejó un vendedor.
Don Marcos Salgado es un veterano habitante del barrio San Miguel de Masaya. Asegura por su lado que a sus 89 años, no había visto algo parecido en su ciudad. “¿Demoler en las instalaciones de la Policía para instalar una tienda? Eso es increíble”, señala el ciudadano.
Desplazan a los informales
El negocio del que habla Salgado, es una de las tiendas chinas más vistosas de Masaya. El local podría alcanzar los 10 metros de largo por seis de ancho. Se construyó en la acera trasera de la estación de Policía, dónde antes se ubicaban negocios informales como vendedores de frutas, comidas, bebidas y de mascarillas.
Don Marcos contó que a finales del año pasado se demolió el muro de piedras de la parte trasera de la estación de la Policía de Masaya. El hecho no pareció inusual y todos creyeron que se trataba de la construcción de una nueva entrada al edificio que debido a la represión, los masayas apodaron como “la guarida”.
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Tremenda sorpresa se llevaron los ciudadanos cuando meses después vieron que la nueva construcción era un galerón para una tienda. Muchos, hasta llegaron a pensar que se trataba de un negocio de la institución, pero con el tiempo se dieron cuenta que era una tienda china. “Esos negocios han empezado a devorar la ciudad y otros negocios”, menciona Salgado.
“He visto que llega bastante clientela y me han dicho que las cosas no son tan baratas ahí. Lo curioso es que empezaron con todo tipo de productos, hasta ropa interior, y no hace mucho tiempo (pocos meses) inauguraron una ampliación de la tienda para ofrecer calzado. Todo de los mismos chinos”, aseguró.
Lo que ofrecen
En esta tienda se ofrece una cantidad innumerable de productos, desde cosméticos hasta utensilios para cocina. Algunos compradores aseguran que la calidad de estos productos, no es de lo mejor, pero que resuelven. “Esto es solución, más costos”, dice un visitante del lugar, quien mencionó que se hallan zapatos más económicos que en el mercado municipal.
Azucena García de 38 años es una madre soltera que vive en Monimbó. Ella contó que hace un mes llegó a esta tienda, compró un abanico para su casa pero que luego lo regaló a un familiar. Después de un tiempo, su pariente le comentó que el electrodoméstico dejó de funcionar y que lo guardó para venderlo como chatarra.
“No es tanto el precio, sino la calidad de los productos. Ellos te lo prueban pero no hay garantía porque son productos eléctricos, no es como las casas comerciales donde te dan garantía, pero es obvio que hay que pagar más. Bien dice el dicho, lo barato, puede salir caro”, manifestó García.
Sobre otros productos como el calzado, conocimos que algunos son muy parecidos a los que se ofertan en el mercado local. “La ventaja es que en el mercado podés regatear y en la tienda china, el precio que tiene es. En ese sentido, es el mejor el mercado”, dijo por su lado otro comprador. “¿Dilatan si? –preguntamos-. Si son buenos”, respondió una funcionaria de la tienda.
Una tienda con “todo a 40 pesos”
Otra de las tiendas chinas que se ha hecho popular entre los masaya por sus productos y precios, es la que se ubica enfrente al Parque Central de esta ciudad. Esta fue una de las tiendas más conocidas por su promoción “todo a 35 córdobas”, aunque ahora los precios cambiaron y podés encontrar artículos hasta en más de 100 córdobas.
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Pese al cambio en la política de precios, Katherine Alemán, de 35 años de edad y habitante del municipio de Nindirí, señala que esta tienda ofrece productos a un precio “accesible”. Dice que en la tienda se pueden encontrar variedad de cosas y colores, “desde un corta uñas, hasta un llavero”.
“Hay orden, variedad y precios accesibles. He visto que se les llena, pero yo sigo prefiriendo ir al mercado porque lo que más compro es la comida y ahí (en la tienda china) no hay”, admite Katherine, no obstante. Asimismo, en la entrada al mercado “Ernesto Fernández” se ubica otra de las tiendas chinas, OMÍ, conocida como uno de los “bodegones” más grandes de la ciudad con productos importados directamente desde China y que se ofrecen al detalle y al por mayor.
Una joven del barrio San Carlos de nombre Claudia, dice que haber entrado a esta tienda fue una de sus mejores experiencias por la seguridad de encontrar todo en un solo lugar. Además, que los precios son “accesibles” para lo que necesita una universitaria como ella. “Andaba con mi mamá y ella compró cortinas…yo pinturas de labios, calcetines, una cartera y otras cosas, casi nos gastamos los C$500. Me gustó porque hay bonitas cosas”, expresó.
Al ser cuestionada sobre la calidad y durabilidad de los productos que adquirió, dijo que son buenos porque “hasta ahora” ninguno se ha dañado.
Incrementa importación de China
Estos negocios chinos empezaron a ganar terreno desde que el pasado 1 de enero entró en vigor el Tratado de Libre Comercio (TLC) entre Nicaragua y China, el cual busca que el 71% de productos de exportación del país centroamericano, tengan acceso inmediato al mercado del gigante asiático con arancel cero.
Masaya, que es un departamento artesanal por excelencia, aún parece sobrevivir a la creciente “fiebre china” que ofrece sus productos “mágicos” y artículos curiosos que llaman la atención de los que se consideran “compradores compulsivos”. De acuerdo a cifras oficiales, entre 2019 y 2023 las importaciones chinas de Nicaragua se duplicaron con un aumento de 654.3 millones de dólares.
Entre los principales productos que Nicaragua importa más desde China destacan telas, tecnología casera, estuches y baúles. Además de motocicletas, pesticidas, calzado de goma, fertilizantes, neumáticos, juguetes, instrumentos médicos, mallas metálicas, botellas de vidrio, entre muchos otros.
